La Ermita de Nuestra Señora de Regla se encuentra en el centro del pueblo de Pájara en Fuerteventura. La casa de la familia de Meritxell está muy cerca de allí así pues, la distancia a recorrer el día de la boda era unos pocos metros.
La tarde de la ceremonia me desplacé a la Casa Rural donde estaban hospedados Jesús y su familia. Fui recibida con mucho cariño, su madre, abuelos y demás familia son gente sencilla y agradable.
Jesús y su familia se habían trasladado temporalmente a el pueblo de Pájara, Fuerteventura, Islas Canarias. Habían escogido este lugar para celebrar su boda.
Estuvimos hablando rato, comentado sobre la boda. Pasado un rato me acerqué a Jesús, le besé y le pregunté si estaba listo para comenzar. Él, me miró, cogió su móvil y busco una melodía: un tema de Enya sonaba suavemente. Necesitaba relajarse un poco… –Charo, cuando quieras podemos comenzar – me dijo, pausadamente, transcurridos unos minutos.
Meritxell había decidido vestirse en casa de su tía Estrella. Escogió ese lugar porque la habitación era espaciosa y bien iluminada. La luz que entraba era espectacular. Ella se encontraba muy tranquila, deseando que Noelia llegara y comenzara a maquillarla. El ambiente que se respiraba en la estancia era acogedor y relajado.
Cuando Meritxell terminó de prepararse, apareció su padre. Me impresionó como miraba a su hija. Aquellos ojos expresaban la emoción que sentía, no podía articular palabra. Se miraron, se besaron y salieron a la calle. Quedaba muy poco para encontrarse con su amor. ¡Qué radiante estaba Meritxel el día de su boda!. Agarrada del brazo de su padre y orgullosa de ir con él, avanzaba con paso seguro y tranquila.
A unos metros de allí se encontraba la iglesia de Nuestra Señora de Regla y Jesús junto a su madre esperaban su llegada. Le sentía emocionado y algo nervioso. Según iba acercándose se encontraron con la mirada y Jesús comenzó a relajarse y es lo que tiene Meritxell, es una mujer que transmite mucha tranquilidad. Fueron momentos muy intensos los que vivimos.
Habíamos hablado que después de la boda iríamos a una playa para hacer una serie de fotografías de Postboda. No podía imaginar lo que me iba a encontrar. ¡Qué sorpresa me llevé cuando vi aquella playa conocida como La Solapa. Fuerteventura, Islas Canarias! La luz era espectacular y tuvimos la suerte de que se encontraba solitaria. Les di unas pautas a seguir para hacer el reportaje y así comencé a tomar estas maravillosas fotografías. ¡Ah, por cierto, el corazón que aparece estaba dibujado en la arena, nos encontramos con con él. En voz alta dije: ¡alguien lo pintó para vosotros!
Y este es el resultado de una tarde maravillosa.
Para siempre un sueño compartido
¡Qué hermoso es ver el día coronado con el beso de la lumbre! ¡Que hermosa la mañana, y siempre, junto a ti: la luna y el sol radiante!; ¡feliz!, henchirse de amor el alma.
Quiero agradecer todas las cosas buenas que pasaron el día de la boda. Lo bien que me encontré con vosotros y vuestra familia. Las risas, los momentos llenos de emoción y encanto quedan guardados en mi corazón.
¡Gracias por permitirme realizar este reportaje de boda en Fuerteventura Gran Canaria!
Una pequeña reseña: Los poemas están escritos expresamente para este reportaje de boda por José Francisco González Ramírez.
Ser fotógrafo de boda en Madrid me permite llegar allá donde un corazón me reclama. En esta ocasión fue en esta boda en Fuerteventura, un lugar lleno de encanto, embrujo y mágico.
Amor, paz y felicidad para todos vosotros, mis visitantes
Las fotos preciosas y la postboda me encanta!! Charo eres una artista de la fotografía!!
Preciosas imágenes Charo, enhorabuena!!! Que luz tan increíble hay en esas islas ehh…es para enamorarse mil veces…Gracias x compartirlo 🙂
Me encanta este reportaje Charo, unas localizaciones preciosas donde has sabido plasmar la felicidad de los novios. Enhorabuena! Un abrazo
Felicitaciones Charo, las fotografías son grandiosas!, imágenes cálidas, al igual que lo narrado, creando un clima amoroso que, el espectador, no puede dejar de ser testigo, y que va mucho más allá de lo ceremonioso o convencional.
Un abrazo
Hola Charo, muy bonitas tus fotografíás, y precioso lo que has escrito sobre la boda. ¡Felicidades por este gran trabajo!.
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